Cuidar los dientes desde la primera infancia resultará beneficioso para toda la vida, pero ¿Qué tipo de cuidados deben tener los padres con sus hijos? Al respecto el Dr. Guillermo Mauricio Oliva Colville, odontólogo con especialización en ortodoncia y ortopedia, entrega algunas recomendaciones para mantener una sonrisa saludable desde edad temprana.

La protección de dientes y encías desde la primera infancia no solo tiene una importancia estética, sino que además puede favorecer a prevenir problemas de lenguaje, posturales e incluso respiratorios.

A continuación, detalles de la entrevista efectuada al Dr. Oliva con algunos consejos para tener en consideración:

1.- Prevención de caries:

En chile, un 17% de los niños/as de 2 años están afectados con caries. Esta cifra aumenta considerablemente a una cifra cercana al 50% en los menores de 4 años.

Hoy en nuestro país la caries temprana de la infancia (Caries que afecta a menores de 6 años) es un gran problema de salud. “Esto porque es una patología bacteriana que afecta a los tejidos duros del diente. Para que se produzca este fenómeno deben existir varias entidades, a conocer, un diente, un ambiente cálido y húmedo, una dieta ad hoc y un tiempo determinado. El factor que podemos manejar en este tipo de patología es la dieta, y sobre todo los alimentos altamente azucarados, acompañado de una buena técnica de higiene, podemos controlar en un alto porcentaje el daño en los dientes.” A partir de esto en importante dar énfasis a los cuidados dentales desde temprana edad.

2.- ¿A qué edad se debe iniciar la higiene bucal de los niños/as?
¿Cuál es la importancia de los dientes de leche en este aspecto?

Al contrario de lo que se suele pensar, la higiene bucal debe iniciarse desde el nacimiento. El Dr. Oliva señala que “La higiene de la boca debe empezar a practicarse desde que el bebé comienza a ingerir alimentos (lactancia), limpiando las mucosas de la boca del niño después de cada ingesta
alimentaria. Luego de la aparición de los primeros dientes (alrededor de los 6 meses) deberán incluirse en la técnica de aseo.

Además, a partir de los tres años o desde que se controla el reflejo de la deglución se pueden indicar pastas fluoradas.

Respecto a los controles dentales el Ministerio de Salud (MINSAL) ha desarrollado el Programa Cero que está orientado a controlar los enfoques de riesgo odontológico, estableciendo la atención dental a partir de los 6 meses de vida al menos una vez al año, lo cual además se acompaña de un asesoramiento y educación a los padres respecto de la limpieza y cuidado bucal. Sin embargo, el
Dr. Oliva señala la importancia de realizar un trabajo profundo desde la etapa del embarazo, especialmente para guiar a las madres sobre el proceso de lactancia.

3.- Recomendaciones sobre el uso de anestésicos en casa para aliviar dolores provocados por la dentición:

Otro aspecto fundamental que los padres deben conocer sobre el cuidado bucal de los niños/as es que no se debe utilizar anestésicos tópicos para aliviar el dolor de la dentición, tal como se usaba en el pasado. “La aparición o exfoliación de los primeros dientes debe ser considerado un proceso
natural en el ser humano y como tal debe ser observado y controlado más no intervenido” enfatiza el Dr. Oliva Colville.

4.- Sobre el uso de accesorios:

La asociación chilena de odontología indica que uno de los mayores riesgos del uso del chupete más allá del tiempo recomendado son las deformaciones en la boca del niño. Si este hábito se extiende hasta los seis años de edad, los problemas son variados: los dientes centrales inferiores se desvían hacia dentro, mientras que los superiores se separan y desvían hacia fuera.

Por último, es importante comprender que, aunque los accesorios dentales suelen ser de gran ayuda, su uso debe ser restringido. “La alimentación del niño desde su nacimiento debe estar encargada exclusivamente por la madre. El amamantamiento en todas sus etapas, determinará tanto el desarrollo físico, intelectual y emocional del individuo” señala el especialista en ortodoncia y ortopedia. “La incorporación de mamaderas y chupetes en esta etapa interferirá gravemente con el desarrollo integral de los niños/as, provocando una serie de patologías tales como el “síndrome del respirador bucal” agrega.